Encuentros con René Char

El autor de estos Encuentros frecuentó a René Char de 1954 a 1987, primero en la rue de Chanaleilles, cuando el poeta repartía aún su tiempo entre París y la Provenza, después sobre todo en Vaucluse a partir de 1973, cuando Jean Pénard volvió a Francia tras varias temporadas en el extranjero.

Éste le había dicho a René Char que anotaba sus entrevistas, no para extraer de ellas un partido u otro, sino para intentar sustraer a la muerte lo que se le pueda hurtar. No hace falta decir que Jean Pénard no posee ninguna verdad de conjunto sobre su compañero. René Char era un ser multiforme, descentrado o concentrado en extremo, cosa sin la cual, por otra parte, no hubiera sido el admirado poeta que fue. Otros han empezado ya a trazar un retrato suyo que no es ni más inexacto ni más justo que el que aparece en este libro. Char reservó para cada cual un contorno de sí mismo. Cruzó sus rasgos y se ha mantenido así intocable.

Los encuentros relatados aquí fueron todos improvisados, enfrascándose ambos interlocutores en temas comunes: la poesía, la pintura, la moral y la política, los animales y la naturaleza, los célebres y los anónimos, los cercanos y los lejanos, la guerra y la paz. Ninguno de ellos interrogó propiamente al otro por saber. Ninguno franqueó deliberadamente el silencio del otro.

Jean Pénard ha reunido estas páginas non solum in memoriam sed in intentionen del amigo que fue para él, durante más de treinta años, el más querido y el más sorprendente de todos. Quedará el testimonio de una perdurable complicidad, al restituirnos estas páginas un Char de una gran simplicidad, cálido o glacial, siempre muy próximo aun cuando a veces lejano.