Piero Sraffa

La obra de Piero Sraffa, breve pero sustanciosa, ha dado lugar a un famoso, intenso y prolongado debate en el ámbito de la teoría económica. Sin embargo, el perfil exacto de su personalidad sigue siendo bastante borroso no sólo para muchos economistas, sino sobre todo para el público culto en general, circunstancia a la que ha contribuido, sin duda, su talante personal excepcionalmente discreto, su proverbial reserva tanto en lo público como en lo privado.

De Sraffa se conoce su cuestionamiento de algunos fundamentos de la economía marshalliana, su magistral edición de las Obras y correspondencia de David Ricardo y su ensayo, notablemente críptico para los no economistas, Producción de mercancías por medio de mercancías, que dio origen a una corriente sraffiana incardinada en la revalorización de la economía política clásica en el curso de los años setenta y primeros ochenta. Sin embargo, la trayectoria intelectual y política que documenta la presente biografía es sorprendentemente más rica y variada. Amigo y punto de apoyo de Antonio Gramsci durante sus largos años de cárcel, vínculo entre el partido clandestino y su dirigente, Sraffa mantuvo un fecundo diálogo intelectual con el más importante marxista italiano y, a la vez, fue promotor casi involuntario de una nueva escuela de pensamiento económico, como ya se ha dicho, e inspirador y crítico de figuras centrales de la cultura europea como Keynes, Wittgenstein o Ramsey.

Este libro reconstruye la vida y la evolución intelectual de Sraffa desde sus días de estudiante con simpatías izquierdistas en los años posteriores a la primera guerra mundial hasta su prolongada época de bibliotecario de la Marshall Library of Economics de Cambridge. Se establece aquí su trayectoria política en Italia, que le llevó a tener que huir del régimen de Mussolini y a establecerse en Inglaterra, por mediación de su amigo Keynes. Se detalla su relación con Gramsci, analizándose con particular detenimiento sus profundas discusiones filosóficas y también políticas, así como su papel en la salvaguarda de los Cuadernos de la Cárcel. También se presta atención a capítulos poco conocidos de su labor académica y científica en la Universidad de Cambridge, que se inició en la época en que se estaba gestando la revolución keynesiana.