El sector del libro estima que ha perdido un millón de ejemplares por los efectos de la DANA
A tres semanas de la catástrofe, también empiezan a conocerse datos más certeros del patrimonio cultural afectado. Uno de los sectores más afectados ha sido el del libro, en el que las editoriales asociadas del País Valenciano han sufrido daños por el temporal devastador, con maquinaria totalmente arrasada, almacenes anegados, el fondo editorial perdido y problemas de distribución, al margen de los daños humanos.
La Associació d’Editorials del País Valencià (AEPV) ha comunicado que al menos 34 editoriales de la Comunitat Valenciana se han visto afectadas por el impacto de la DANA, que ha provocado pérdidas en instalaciones, equipos, materiales y vehículos de las editoriales. Según el cálculo inicial de la AEPV, se estima que el sector editorial ha perdido cerca de un millón de ejemplares.
Entre las 34 editoriales afectadas, 20 son miembros de la AEPV: Editorial Afers, Algar Editorial, Andana Editorial, Balandra Edicions, Edicions Bromera, Edicions Voramar (Santillana), Grupo Editorial Sargantana, La Orquídea de Darwin, Litera, Llibres de la Drassana, Llibres de l'Encobert, Nau Llibres, Perifèric Edicions, Publicacions de la Universitat de València, Publicacions de la Universitat Politècnica de València, Sembra Llibres, Editorial Tinturas, Tirant lo Blanch, Tres i Quatre, y Vincle Editorial.
Además, 14 editoriales no asociadas también han visto afectados sus fondos: Animallibres, Edicions Camacuc, Cuentos de Fábula, Ediciones Hades, Ediciones Contrabando, Ediciones Llum de Lluna, Ediciones Mahali, Fuera de Ruta, Batidora Ediciones, Librolandia, Ediciones Micomicona, Savanna Books, Unaria Ediciones, y Tu Cuento y Tú.
Desafortunadamente, la DANA también ha arrasado los libros de más de una docena de librerías, bibliotecas públicas municipales, archivos municipales y centros escolares.
Los archivos municipales constituyen la memoria documental de sus pueblos, y los estudios sobre sus fondos permiten conocer nuestra historia local y comarcal. Por otro lado, las bibliotecas municipales son espacios de fomento de la lectura, lo que resulta de gran importancia para los vecinos como modo de transmisión del conocimiento y la cultura.
El futuro es complicado, pero la mejor contribución en estos momentos difíciles es comprar libros de las editoriales y librerías que aún cuentan con material disponible para la venta con el fin de colaborar en su recuperación económica: una campaña solidaria que ya ha reunido a más de 200 librerías de toda España, que están adquiriendo ejemplares de los establecimientos afectados que aún cuentan con material disponible.