Miguel Ángel López-Egea inaugura la nueva colección «L’Instant. Fotografia»

La Institució Alfons el Magnànim inicia con este volumen una nueva colección, «L’Instant. Fotografia», destinada a recuperar la obra de aquellos fotógrafos profesionales de diferentes localidades que, además de realizar los encargos habituales que les permitían ir tirando, sintieron una vocación fotográfica particular que los dirigía a plasmar todo tipo de elementos cotidianos desde la sensibilidad de una mirada propia.
Es por ello que con la colección «L’Instant» queremos reivindicar y valorar fotógrafos que desde las diversas comarcas y localidades han estado autores de un corpus visual compacto y coherente, producto de una sensibilidad y de una calidad técnica y estética capaz de influir en la configuración de nuestro imaginario colectivo.
En este volumen, Miguel Ángel López-Egea. Tradició i modernitat a la Ribera Baixa, hemos seleccionado un conjunto de imágenes del que, entendemos, configura el corpus más exitoso y de mayor peso específico de la obra de López-Egea.
También, quizás, el más conocido y el de mayor difusión: el del cultivo del arroz en Sueca y de la Albufera, un trabajo que siempre quedará asociado a este fotógrafo.
En las fotografías del cultivo del arroz es donde se percibe aquella transición entre la tradición y la modernidad, puesto que el paso de la década de los cincuenta a los sesenta será el momento en que el campo, en general, y el cultivo del arroz, en particular, experimentarán cambios que los dirigirán a la transformación más absoluta, dejando atrás las formas tradicionales que se habían mantenido durante siglos.
En la admirable pulcritud y sencillez de las fotografías de López-Egea, hay siempre una voluntad documental que nos acerca la cotidianidad de aquellos años.
Las fotografías nos golpean y nos emocionan, por lo que se han instalado, sin ni pedirnos permiso, en el más profundo de nuestro imaginario. La colección fotográfica que nos ha legado el señor López-Egea es un documento impagable. Nunca unos ojos habían mirado antes, tan atentos, el pueblo.
Miguel Ángel López-Egea Martínez-Carrasco (Caravaca de la Cruz, 1906 - Sueca, 2002). A los once años, Miguel Ángel López-Egea entra de aprendiz en un estudio de fotografía de la calle de San Vicente de València y al mismo tiempo cursa estudios de dibujo artístico en la Escuela de Artesanos de la calle del Pintor Sorolla. Completa la formación pasando por otros dos estudios de fotografía de la ciudad y con tan solo veinte años ya es encargado de taller y operador de primera en el estudio de José Ara, en la calle de Russafa.
Con veintitrés años, habiendo consolidado su formación, decide establecerse por su cuenta y tras valorar hacerlo en varias localidades, como por ejemplo Alzira o Xàtiva, acaba eligiendo la ciudad de Sueca para instalarse, situando el estudio en la calle del Barrot, junto a la entrada de artistas del Teatro Serrano, donde retrata de balde los artistas que actúan para usarlos como reclamo publicitario para la clientela. Poco después, se casa con la suecana Alejandrina Vilache, profesora de música, con la cual tendrá dos hijos, Fernando y Miguel Ángel.
Como fotógrafo de prensa, colabora en diferentes publicaciones y el 1948 es nombrado corresponsal de la agencia EFE y colaborador gráfico de la agencia CIFRA.
Iniciada la década de los cincuenta del siglo XX, López-Egea empieza a recibir encargos que le permiten viajar, cámara en mano, para realizar varios reportajes y, a partir de 1960, la Federación de Productores Arroceros, acabada de crear, le encomienda o le compra las fotografías que realiza sobre el cultivo del arroz.
Con la jubilación, el 1971, abandona la fotografía y se centra en colaboraciones periodísticas a la prensa local y el diario Las Provincias, de València.
El año 1994, el Ayuntamiento de Sueca lo distingue con el título de Hijo Adoptivo y el 2001, un año antes de su deceso, edita el libro Imatges i paraules de López-Egea per a Sueca.
El archivo de López-Egea, mediante un convenio del 2013 entre los herederos del fotógrafo y el Ayuntamiento de Sueca, fue digitalizado y depositado en la sección local de la Biblioteca Municipal de Sueca para ponerlo a disposición de quién deseara consultarlo.